10 consejos para proteger a tu gato del calor
Los ancestros de los gatos domésticos habitaban en el desierto, de ahí que estén dotados de mecanismo eficaces para combatir las altas temperaturas. Por ejemplo, los gatos no sudan, pero pueden liberar calor a través de sus almohadillas.
CÓMO PROTEGER A TU GATO DEL CALOR
Tú también puedes contribuir para que pase mejor la calurosa época estival con los 10 consejos que tienes a continuación:
- Coloca agua en varios lugares para combatir la deshidratación y cámbiala a menudo para que siempre esté fresca.
- Proporciónale lugares frescos donde haya corriente y no dé el sol directo. A los gatos les encantan las cajas de cartón, prueba a distribuir algunas por casa.
- El pelo muerto que se acumula durante la muda estacional y sobre todo los nudos que se les hacen a los gatos de pelo largo, retiene la temperatura. Cepíllalo todos los días para liberar ese exceso de calor.
- Si hace mucho calor puedes refrescarlo mojándole las almohadillas de sus patas.
- Nunca lo dejes solo en una habitación cerrada, en el coche o en el transportín.
- Si tienes que transportar a tu gato, hazlo en las horas más frescas del día.
- Ten especial cuidado con cachorros, gatos ancianos y razas de morro chato (braquicéfalos), dado que son más sensibles al calor.
- Si se trata de gatos que pasan mucho tiempo en la calle, que siempre dispongan de sombra donde guarecerse.
- Existen cremas solares específicas para que no se quemen zonas delicadas como las orejas.
- Durante las horas más calurosas mantenlo tranquilo, sin jugar con él excesivamente.
Si sigues estos consejos habrá menos probabilidad de que tu gato tenga problemas por las altas temperaturas y evitarás golpes de calor.
¿Qué tal pasa tu gato el verano?