Qué hacer si tu gato no come y posibles causas
Si tu gato no come o come menos de lo habitual, en este artículo tienes las principales causas y la mejor manera de solucionar el problema.
Denominamos anorexia felina al trastorno que se produce cuando un gato deja de comer. Puede que un gato un día puntual, por diversas razones, se niegue a comer. Esto no es del todo preocupante si no se alarga demasiado tiempo. Sin embargo, si la situación continúa es cuando debemos preocuparnos.
Cuando un gato pasa varios días sin comer, puede sufrir lo que se llama una lipidosis hepática felina. Esta enfermedad es muy grave y tiene un alto grado de mortalidad.
RAZONES POR LAS QUE UN GATO NO COME
Un gato puede negarse a comer de repente por diversas razones. Estas causas las podemos englobar en 2 grandes grupo: razones externas y razones internas.
RAZONES EXTERNAS
A los gatos no les gustan nada los cambio de cualquier tipo y su forma de llevar esta situación es dejando de comer.
Cambios de alimentación: Algunos gatos padecen neofobia o intolerancia a los cambios, en este caso, de alimentación. Cuando cambies su dieta, debes hacerlo de manera gradual, nunca de golpe.
Su plato no está en un buen sitio: Los gatos pueden negarse a comer si su plato de comida está cerca del arenero. Tampoco les gusta comer en lugares donde hay mucho ruido, como cerca de la lavadora. Así que debes controlar donde pones su comida.
Cambios en su entorno: Como hemos visto antes, los felinos son muy maniáticos. Una mudanza o un cambio de mobiliario puede afectarles lo suficiente para dejar de comer. Este es un síntoma de estrés muy habitual en nuestros amiguitos y deben acostumbrarse a su nuevo entorno.
Llegada de “invitados no deseados” a casa: Ya sea por traer una mascota de visita o por un nuevo miembro de la familia. Muchos gatos llevan muy mal la convivencia con perros o con otros gatos.
Calor: Si bien el gato no deja completamente de comer, el calor puede afectar mucho a su apetito.
RAZONES INTERNAS
En muchas ocasiones, un gato no come porque tiene algún problema interno:
Intoxicación: Pude haber ingerido algún alimento inadecuado, mordido un planta tóxica o haber tomado o inhalado algún producto tóxico.
Varias enfermedades: La falta de apetito puede ser síntoma de muchas enfermedades que solo se pueden diagnosticar en el veterinario.
Problemas dentales: Si a tu gato le duele la boca, es muy probable que se niegue a comer. Los gatos ancianos son más propensos a tener estos problemas, pero enfermedades como el calicivirus o el FORL, también los provocan.
Bolas de pelo: Los gatos de pelo largo pueden sufrir obstrucciones por la acumulación de pelo en su estómago. Para evitar esto, debes cepillarlo a menudo y darle malta, especialmente en época de muda.
QUÉ PUEDES HACER SI TU GATO NO QUIERE COMER
Para conseguir que un gato vuelva a comer, lo principal es descubrir la razón por la que ha dejado de hacerlo. Comprueba si las razones externas que hemos mencionado son la causa de que tu gato no coma e intenta rectificarlas.
Si a pesar de todo, tu peludo se niega a probar bocado:
Llévalo al veterinario: Es la medida más recomendable ante cualquier sospecha. Si tu gato lleva más de un día sin ingerir alimentos, debes acudir cuanto antes a una clínica.
Dale comida apetecible: La comida húmeda les suele gustar mucho más a nuestras mascotas. En vez de dársela fría, puedes calentarla un poco en el microondas. En estado salvaje, las presas que cazan están calientes y eso estimula el apetito del animal.
Mezcla la comida húmeda con la seca: Si quieres que se alimente de pienso seco, puedes mézclalo con un poco de comida húmeda o casera.
Pon varios comederos por casa: Así podrá elegir en qué lugar se siente más cómodo para comer.
Cambia la comida: En ocasiones los gatos rechazan determinadas marcas de comida.
Si tu gato no come, puede que tampoco se esté hidratando adecuadamente. Debes controlar por tanto la cantidad de agua que ingiere para que no se deshidrate.